Código Patrón le consultó a diferentes protagonistas del plantel de Gabriel Graciani las formas en las que recibieron la pérdida de categoría del Rojinegro y las sensaciones del mismo.
Por: Gabriel Obelar
Patronato ya perdió la categoría, si bien queda la esperanza de la anulación de los descensos y la modificación del Torneo del año próximo, el descenso comenzará a tener sus repercusiones con el pasar del tiempo. Este martes, la Reserva de Patrón pudo haber disputado su último cotejo en condición de local, si es que lo de AFA no prospera, mientras que ante Huracán, podría disputar su último encuentro en la División.
Código Patrón le consultó algunos de los protagonistas del equipo de Gabriel Graciani sobre sus sensaciones y cómo repercutió la pérdida de la categoría del primer equipo, mientras que muchos coincidieron en el ejemplo que generó el conjunto de Sava y el agradecimiento por la entrega.
GINO MILOCCO: El arquero que tuvo su debut esta temporada en el arco de Reserva, comentó: «Lo que pasó con el descenso pegó, en lo personal y en lo grupal. La incertidumbre también crece por todo lo que puede pasar con nosotros si se consuma lo del descenso».
«Si bien existe un Torneo de Reserva en la B, es muy costoso y no se sabe si existirá la chance de jugarlo, si habrá inferiores de AFA y no se sabe que equipos tocaría», expresó e indicó: «Estamos con la incertidumbre de no saber que pasará. Ahora rogar que se haga lo de los 30 equipos, porque si se da el descenso, no se sabe que pasará con nosotros».
«Después, orgullosos por el año que hizo el plantel, recalcamos la actitud, el animarse a cualquier rival. Nos cayó mal, pero con un orgulloso y el pecho inflado por como se representó al club y el ejemplo que dejaron», resaltó.
JERÓNIMO ALMADA: El central que tuvo su oportunidad en el primer equipo con Álvarez y termina el Torneo siendo clave en el once, también dejó sus sensaciones: «Fue una noticia dura la del descenso para nosotros, porque teníamos esa ilusión de la permanencia».
«De igual manera, destacamos el esfuerzo y la entrega de los jugadores que la pelearon hasta lo último, demostrando lo que es la identidad Rojinegra». A la vez, contempló: «Con respecto al plantel de Reserva, tras la noticia, mantuvimos una seriedad y un compromiso de trabajo muy bueno, con el objetivo de aportar lo mejor de cada uno para estos últimos partidos del año».
GUIDO FRANCISCONI: Uno de los que alternó entrenamientos con Primera, también contó sus sensaciones: «Como grupo, más allá de que sabíamos que era algo que podía llegar a pasar, porque no dependíamos de otros equipos, mantuvimos la esperanza intacta hasta el último minuto».
«Más allá de lo que pasó, no quedamos con el esfuerzo que hicieron los jugadores y el cuerpo técnico y como partido a partido jugaban finales dejando la vida dentro de la cancha y creo que lo que ellos reflejaban no eran solo sus ganas de permanecer, sino la de todos los que de alguna forma u otra somos parte del club e hinchas».
Por último, el lateral resaltó: «Buscamos entre todos seguir unidos como grupo, dejar todo en los últimos dos partidos y después hacerle frente de la mejor manera a lo que vendrá».
SANTINO GIACINTI: El mediocampista, también comentó: «El plantel recibió el descenso de la mejor forma, por más que un descenso no es nada lindo, lo jugadores hicieron todo lo posible para qe Patronato pueda quedarse en Primera y eso te deja tranquilo».
A la vez, resaltó: «Esta situación la venimos llevando sabiendo que cada uno tiene que aportar su granito de arena desde el lugar que le toque, tirar todos para adelante como venimos haciendo para poder ver a Patronato lo más pronto posible en la elite del fútbol argentino».
JOAQUÍN BAROLÍN: El delantero, que también tuvo la chance de concentrar con el primer elenco, dejó sus sensaciones: «El tema del descenso es algo que se venía postergando, creo yo. En algún momento iba a pasar, pero este cuerpo técnico y jugadores no se lo merecía, pero así es el fútbol».
En la misma tónica, soltó: «La sensación que dejó fue muy fea, mucha amargura. El haber estado citado y compartir un banco con ellos me hizo querer un poco más al club. Después, tratamos de no pensar tanto en ello, porque no había tiempo para estar mal, porque teníamos que preparar la cabeza para los últimos partidos y enfocarnos en lo que queda del Torneo».
